Gráfico 1: Nivel de análisis de la actuación profesional del pedagogo
Primer nivel de análisis:
Contexto
Contexto formal: profesional de la educación que trabaja en el ámbito de la enseñanza
reglada y no reglada, desde la educación infantil hasta la universidad. Imparte
programas reglados y específicos, da soporte a la educación formal y promueve la
integración sociolaboral. Entre otros, algunos de sus perfiles pueden ser: profesor de
universidad, orientador en centros de secundaria, asesor de equipos docentes e inspector
del sistema educativo.
Contexto social: profesional de la educación que procura optimizar actividades,
conductas, dinámicas, problemáticas, etc. en el ámbito de la educación no formal e
informal. Es considerado un potenciador de la cohesión social y promotor del bienestar
social. Entre otros, algunos de sus perfiles pueden ser: insertor en organizaciones
sociales, mediador en una entidad, coordinador de equipos multidisciplinares y director
y gestor de proyectos.
Contexto empresarial: profesional de la educación que desarrolla su tarea en una
organización/empresa de producción de bienes o de servicios. Su mayor labor es dar
respuesta a las necesidades educativas y de promoción en el área de los recursos
humanos gestionando el desarrollo de las personas. Entre otros, algunos de sus perfiles
pueden ser: responsable de la gestión de personas, evaluador en una empresa,
coordinador de programas formativos y responsable del diseño y elaboración de
materiales.
Segundo nivel de análisis:
Ámbito de actuación
Ámbito educativo y formativo: engloba la educación formal desde la más tierna
infancia hasta la universidad, toda la formación oficial de postgraduación y la formación
continuada (Rodríguez, 2012). Promueve el cambio, de personas de todas las edades.
Además podemos concretar procesos formativos en el campo de la educación no formal
donde las estructuras no determinan el propio proceso enseñanza-aprendizaje.
Ámbito deportivo: es una actuación pedagógica clave para garantizar que los
programas deportivos -educar y adquirir valores- sean medios para un desarrollo
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armónico del cuerpo y un espacio para la promoción de la convivencia y la participación
en comunidad (Rodríguez, 2012).
Ámbito de los servicios de atención a las personas: espacio reservado a la
intervención socioeducativa determinados por los servicios sociales básicos y
especializados.
Ámbito socioeducativo y sociocultural: repercute en áreas de la esfera personal de
todas las edades de los ciudadanos. Promueve una dimensión educativa en los contextos
concretos donde se desarrolla; contempla áreas productivas, llena espacios lúdicoeducativos
fuera del horario escolar, colabora con la conciliación laboral y familiar.
Potencia una dimensión participativa, ofreciendo alternativas y opciones para proyectos
de futuro laboral y formativo. E incide en una dimensión comunitaria a partir de
vehicular la diversidad cultural mediante valores identitarios y compartidos para la
cohesión social.
Ámbito de la mediación: con carácter transversal se aplica en cualquier situación
donde intervengan relaciones intra e interpersonales (Rodríguez, 2012). Siempre a partir
de la correspondiente especialización -escolar, laboral, familiar,…- la cual determinará
el propio contexto de actuación.
Ámbito de la justicia: con capacitación para intervenir en equipos multidisciplinares en
áreas de educación y reinserción social y laboral. Participando en la puesta en práctica
de métodos con naturaleza pedagógica.
Ámbito de la salud y consumo: el rol del pedagogo/a en este ámbito viene dado por la
prevención (educación para la salud y el consumo en contextos formales y no formales),
la formación, el asesoramiento y la intervención terapéutico-educativa. Tiene carácter
preventivo, en la mayoría de los casos.
Ámbito de cooperación y desarrollo: relacionado con valores universales de
solidaridad, cooperación y voluntariado. Tanto en países en desarrollo como en el
propio contexto para erradicar las desigualdades (Rodríguez, 2012).
Ámbito sociolaboral: consiste en abrir oportunidades de trabajo a nivel público y
privado. Es un espacio profesional que tiene como objetivo facilitar el trabajo de la
población activa: donde el pedagogo/a es un promotor de empleo o agente de
colocación, potenciando las posibilidades de empleabilidad del usuario/a.
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Ámbito de las organizaciones: entendida desde una visión amplia del término -entidad
sin ánimo de lucro, una empresa privada, una administración pública local, entre otrasdonde
la tarea principal es la gestión de personas y de servicios.
Ámbito de educación ambiental: el rol del pedagogo/a en este ámbito viene dado por
la prevención, la formación, el diseño, el desarrollo, la innovación y la intervención
educativa. Tiene carácter preventivo y educa en valores cívicos.
Ámbito social (tercer sector): profesional de la educación en organizaciones sin ánimo
de lucro que procura optimizar actividades dinámicas desde diferentes roles y puestos
jerárquicos promoviendo una mejora de la calidad de vida de los grupos o minorías con
dificultades para su desarrollo personal, familiar y social.
Ámbito de las TICs y medios de comunicación: de carácter transversal por sus
características de medio, de herramienta, de soporte, de vehículo para la creación y
difusión de conocimiento, de facilitador y de democratización de la información. La
finalidad es la de compartir, transferir y acceder a la información y al conocimiento sea
cual sea su contexto de desarrollo (Rodríguez, 2012). El pedagogo/a es una pieza clave
para identificar oportunidades y orientar sobre los diferentes caminos o posibilidades
que dan estas herramientas en las organizaciones (García y Aguilar, 2011).
Ámbito empresarial: profesional de la educación que desarrolla su trabajo en una
organización de producción de bienes y servicios, actuando como empresario o
asalariado. Básicamente pretende promover y dar respuesta a las necesidades educativas
de la sociedad, diagnosticando necesidades, ofertando actividades, elaborando
materiales o desarrollando procesos formativos, asesorando en la formación y
evaluación.
Ámbito de la autoocupación: creación del propio puesto de trabajo mediante la
constitución de una empresa, cooperativa, asociación, entro otros. Para este ámbito, las
cualidades personales del emprendedor son el elemento clave, es decir, disponer de una
voluntad de independencia, iniciativa para llevar a cabo una idea, creatividad del
producto o la capacidad de autonomía serán las características internas que le darán el
valor necesario al desarrollo profesional desde una perspectiva de autonomía. En este
caso el colectivo al que va dirigido o las funciones propias del puesto a desarrollar
quedarían enmarcados en un segundo plano. Dependiendo de la finalidad de la
autoocupación, podrá tener un carácter más o menos social.
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Ámbito editorial: los profesionales de la educación pueden proyectar y poner en
práctica las capacidades pedagógicas, contribuir a la calidad del producto educativo,
diseñar materiales digitales, recursos informáticos, documentos impresos, etc. (Mayol,
1995). El pedagogo/a es el encargado de velar por la tarea educativa y engranar todo el
proceso de la editorial.
Tercer nivel de análisis:
Perfil Profesional
Perfil profesional: características que definen u otorgan un valor añadido y
enriquecedor al quehacer profesional, ahondando, en aquellos ámbitos de
especialización, logros profesionales y resaltando aquellas competencias diferenciadoras
y atractivas al propio desarrollo de la profesión. Es importante recordar que no debe ser
la réplica exacta del propio curriculum vitae.
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